Hace dos años que te fuiste.
Y en estos días, en todo el mundo, te conmemoran.
Una bailarina de ballet clásico, nacida en el caribe, una bailarina imposible; hecha de caña de azúcar, y que contra todo pronóstico (por esa tierra difícil de donde te crearon, por no ser un hada de Viena, o de Estocolmo) rasgó los escenarios de todo el mundo, hasta hacerlos caer a sus pies.
Alicia, cuántas veces te he mirado embobada, queriendo tener tus mismas alas invisibles, tus mismos pies de pan duro y disciplinado. Tu soplo grácil, girando, girando, infinito.
Gracias por todas las veces que me has hecho soñar. Nadie ha escapado de la gravedad como tú. Para tocar el cielo, mientras el telón volvía a abrirse y tú volvías a volar.
Alicia, de todas las hadas, mi favorita eres tú.
Isabel Simón
No hay comentarios:
Publicar un comentario